Yo, ahora un plomero...se habra visto?

He recibido varías llamadas de varias personas interesadas por mi perfil profesional, esto quizás me indica que tanto tiempo y tanto esfuerzo puliéndome y mejorándome no han sido en vano; el otro día tuve una entrevista con un francés para diseñar paisajismo en china…el tipo vestido de color negro como cualquier aburrido arquitecto en Paris me recibe y lo primero que me dice: “yo no se bien como aprenhender sus conocimientos” “no entiendo…no entiendo…” buscando sin cesar alguna señal que le corroborase que yo no era una persona fiable… El tipo me saco de quicio, pero mis respuestas siempre fueron amables y sobre todo muy profesionales, al punto de decirle con toda la paz del mundo que no se preocupara que le continuaría a ver a otros candidatos y así sacar sus cuentas y sobre también sugerirle que el no era la única opción que yo tenia bajo la manga…al “tipo” no lo sentí, pero estoy seguro que es una oportunidad única para pulirme para aun nueva oportunidad. En esta espera de formalización de mi trabajo, me toco trabajar con mi “suegro” Roland, un tipo chiquito, gordito, simpatiquísimo y sobre todo gritón; ha sido quizás una de las semanas mas difíciles que he tenido ya que Rolando repite sin cesar “me entiendes…no, no me has entendido…” y se lanza de nuevo una explicación para explicar absolutamente por tercera vez prácticamente –todo- es así como al final de la tarde, termino exhausto, con ganas de cometer un asesinato y comprendiendo ese dicho sobre los suegros. Es extraño pero creo que puedo entender un poco a esos hijos que se quejan de los padres posesivos, yo habiendo siempre carecido de padre o de tíos. Creo que el problema de Roland es que debe haber sido un niño hiperquinetico y así es su forma de trabajar y hablar, lo único que puedo asegurar es que ha sido una de las semanas mas difíciles que aquí he pasado en los últimos tiempos, y es esta misma semana he recibido la visita a Paris de Luppi, quien gentilmente vino a revisar su “ganado” en esta ciudad.